El plan de carrera, el plan maestro
Un plan de carrera es un proyecto estratégico de formación con el objetivo de que determinadas personas en nuestra compañía puedan desarrollar su potencial, con el tiempo, hacia un puesto con diferentes o con más responsabilidades de las que tienen en el momento actual.
Estos planes de carrera deben estar pactados por ambas partes y requieren un compromiso tanto de parte de la empresa, como del propio trabajador o trabajadora.
Es importante puntualizar que los planes de carrera se enfocan hacia el desarrollo de nuevas actitudes a nivel profesional y a nivel personal, es decir, tanto a competencias duras, como a blandas… ¿Os acordáis del artículo anterior?
Pero, ¿por qué son necesarios?
Insistimos, son indispensables para poder cubrir puestos estratégicos de nuestra organización con personal de la propia empresa, personas comprometidas y con quienes existe confianza mutua.
Pero, además, también son una clara apuesta hacia la motivación de tus colaboradoras y colaboradores. Tanto su motivación, como su eficiencia, puede estar provocada por multitud de aspectos, que pueden ser propiciados, en su mayoría, por la organización. Así, cada vez son más las empresas que llevan a cabo todo tipo de acciones para conseguir una plantilla más involucrada que repercuta en la situación de la compañía y en su productividad.
Sobran los motivos…
Dentro de estas acciones que apuestan por la motivación de los equipos, destacan, los planes de carrera, por su gran relevancia y la multitud de beneficios que otorgan (¿queréis que os contemos alguna más en otro artículo?):
- Alinean: la estrategia de la organización con el desarrollo de personas y equipos.
- Motivan: se apuesta por el crecimiento dentro de la propia empresa. Además, se establecen objetivos y requisitos de acceso a puestos de mayor responsabilidad.
- Consolidan: disminuye la rotación, ya que al poder optar al crecimiento laboral dentro de la misma aumenta el sentido de pertenencia en los equipos y disminuye la incertidumbre sobre el desarrollo profesional de las personas.
- Gratifican: generan en el trabajador un sentimiento de reconocimiento del esfuerzo. De este modo, el compromiso aumenta.
- Inspiran: refuerzan la imagen positiva de la empresa, impulsándola como sitio recomendable para trabajar al preocuparse por el desarrollo, crecimiento y bienestar de las personas.
Nos encanta que los planes salgan bien…
Hacer un seguimiento de la evolución de las personas que participan, ofrecerles orientación y formación continua e implementar las medidas correctivas necesarias para mejorar y acelerar el proceso, son actuaciones esenciales para que el Plan se desarrolle de forma exitosa.
Otro sinónimo de éxito es el grado de compromiso de las personas que participan. Se debe fomentar una cultura corporativa en la que la participación, la transferencia de conocimientos y el ambiente sean los adecuados. Y es que para el desarrollo y crecimiento de nuestros colaboradores y colaboradoras es necesaria la igualdad de oportunidades, la estabilidad en el trabajo o la apuesta de los altos cargos por este tipo de proyectos.
Analiza rigurosamente cuáles son las necesidades de la empresa para la consecución de sus objetivos y qué perfiles podrán garantizarla. Para ello, fija objetivos a corto y largo plazo y crea un plan detallado con actuaciones y acciones que hagan posible el plan en la organización.
Establece un proyecto de carrera basado en las oportunidades de mejora de los perfiles seleccionados, las necesidades de formación y capacitación que se requieren o el método que utilizarás para evaluar su desempeño.
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